fugaces amores eternos

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sábado, 20 de noviembre de 2010

día internacional de los derechos de la infancia

En un día del año 1987 nació el niño cinco mil millones. Vino sin etiqueta, así que podía ser negro, blanco, amarillo, etc. Muchos países, en ese día, eligieron al azar un niño cinco mil millones para homenajearlo y hasta filmarlo y grabar su primer llanto.
Sin embargo, el verdadero niño cinco mil millones no fue homenajeado ni filmado ni acaso tuvo energía para su primer llanto. Mucho antes de nacer, ya tenía hambre. Un hambre atroz. Un hambre vieja. Cuando por fin movió sus dedos, éstos tocaron la tierra seca. Cuarteada y seca. Tierra con grietas y esqueletos de perros o de camellos o de vacas.También con el esqueleto del niño número 4.999.999.999.
El verdadero niño número cinco mil millones tenía hambre y sed, pero su madre tenía más hambre y más sed y sus pechos oscuros eran como tierra exhausta. Junto a ella, el abuelo del niño tenía hambre y sed más antiguas aún y ya no encontraba en sí mismo ganas de pensar o de creer.
Una semana después el niño cinco mil millones era un minúsculo esqueleto y en consecuencia disminuyó en algo el horrible riesgo de que el planeta llegara a estar superpoblado.

EL NIÑO CINCO MIL MILLONES. En Despistes. M. Benedetti







3 comentarios:

  1. La escena de la película es conmovedora y una denuncia en toda regla a la hipocresía del Dinero y el Capital. Recuerdo también otras dos escenas: la del buitre al lado del niño moribundo y la del chinito quitándole la anilla a la granada. Sobran más comentarios.
    Por cierto, me gusta tu blog. Por los temas que tocas y por la sensibilidad y ternura que pones en ellos.

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  2. Siempre atento y comprometido Benedetti, y lo seguirá siendo siempre que lo utilizemos en el momento oportuno, con la visión adecuada, como tú haces ahora.
    La escena refleja una realidad indignante, la de los poderosos haciendo gala de una "bondad" basada en la injusticia y el derroche. Tampoco nos libramos la mayoría que sin ser ricos ni poderosos también hemos nacido en la guinda del pastel. Me cabe la duda de si hacemos lo que nos corresponde, quiero decir que si con una actitud crítica y algún pequeño gesto, ya creemos haber hecho lo suficiente.

    Gracias Ángeles.

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  3. GILGAMESH

    La sociedad, en general es bastante hipócrita.... digo mal, la sociedad no es algo abstracto que exista de manera independiente y aislada del ser humano, por tanto debiera decir que una gran parte de la humanidad es bastante hipócrita, otra parte de la humanidad además carece por completo de cualquier rastro de ética -es decir, no dudan en enriquecerse y en mantener su estatus y su poder manipulando, experimentando y asesinando a un número importante de sus congéneres- y así con la misma frialdad con que firman diariamente la sentencia de muerte de millones de personas, en diferentes zonas del mundo, son capaces de ofrecer una espléndida sonrisa en cualquier acto benéfico o su mejor cara cuando comparten mesa de trabajo en los diferentes organismos internacionales por todos conocidos.
    La miseria y el hambre son un lucrativo negocio para grandes multinacionales como la industria farmacéutica o la armamentística, pues no debemos obviar que es el poder económico el que realmente maneja los hilos de la política local, nacional e internacional...

    ANA

    Comparto tu reflexión y evidentemente no es suficiente con sólo mantener una actitud crítica ante el poder establecido y ante la sarta de injusticias y de mentiras sobre las se sustenta nuestro privilegiado primer mundo. NO es suficiente pero sí que es muy importante tomar conciencia del engaño permanente en el que vivimos; ser conscientes nos proporciona la lucidez necesaria para vivir de una manera más coherente y responsable.

    Un abrazo...

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